¿Qué potencia de luz contratar para tu vivienda?

La potencia eléctrica (es decir, la cantidad de kilovatios que necesita un hogar) es un gasto que el consumidor debe afrontar en cada factura, consuma o no energía. Aunque es un aspecto bastante importante, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), uno de cada cuatro hogares desconoce qué potencia de luz contratar para su vivienda.

Esto puede hacer que estén pagando por una potencia mayor a la que realmente necesitan y, por tanto, que su factura sea bastante más alta de lo que en realidad les conviene. Pero no está todo perdido: es posible cambiar la potencia de luz contratada para así ahorrar en el recibo.

Para que sepas qué potencia de la luz contratar, en Kelisto hemos analizado los distintos tramos que existen y la manera en la que puedes calcular cuál es la que necesitas para tu vivienda.

¿Qué es la potencia de luz de una vivienda?

La potencia contratada es la cantidad de kilovatios (kW) que gastarás en tu casa al mismo tiempo. Es decir, al conectar todos tus aparatos eléctricos a la vez no debes superar la potencia de luz que tengas contratada, ya que, si lo haces, saltará el Interruptor de Control de Potencia (ICP) y habrá un corte de luz (es decir, “saltarán los plomos”). La potencia se refleja en el término fijo de tu factura, es decir, es un coste que siempre tendrás que pagar, independientemente de si consumes energía o no.

La potencia eléctrica es un concepto de gran importancia, ya que se encarga de determinar la “tarifa de acceso” (o “tipo de peaje”) que tiene cada usuario. Los peajes sirven para pagar lo que cuesta que la electricidad llegue hasta tu hogar y representan hasta el 40% de la factura de la luz. Además, tienen el mismo coste para todo el mundo (independientemente de si estás en el mercado libre o regulado) y su precio lo fija el ministerio que tenga las competencias relacionadas con energía (en la actualidad, el de Transición Ecológica y Reto Demográfico).

Desde junio de 2021, con la entrada en vigor de la nueva tarifa de la luz, existe un único peaje de acceso para los consumidores considerados domésticos (con potencia contratada de hasta 15 kW): la 2.0TD. Este peaje sustituye a los antiguos 2.0 y 2.1, tanto en su modo general como en su modo con discriminación horaria (2.0DHA, 2.0DHS, 2.1DHA y 2.1DHS).

¿Cómo calcular la potencia eléctrica de tu hogar?

Para calcular la potencia contratada, puedes recurrir a un electricista que te indique qué consumo realizas en tu hogar. Sin embargo, este servicio supone un gasto que puede que no quieras afrontar.

Otra forma para saber qué potencia de luz contratar es utilizar una calculadora de potencia eléctrica online. Algunas comercializadoras, como Endesa o Iberdrola, tienen en sus páginas web esta herramienta, a través de la cual podrás calcular la potencia de luz que necesitas. En esta calculadora, solo tendrás que indicar el tamaño de tu vivienda, dónde está ubicada, los electrodomésticos que tienes y si dispones de calefacción eléctrica o aire acondicionado.

¿Qué potencia de luz contratar?

Si quieres calcular tú mismo la potencia de  luz a contratar, puedes hacer cuentas simplemente sumando los kilovatios que requieren tus electrodomésticos para funcionar.

Esto te ayudará a saber qué es lo que se debe contratar para evitar cortes en el suministro, es decir, que “salten los plomos” cuando se enciendan muchos aparatos a la vez.

Una vez que tengas dicha suma, esta se debe multiplicar por el factor de simultaneidad, que indica la cantidad de veces en la que los electrodomésticos de un hogar están funcionando a la vez. El máximo de este factor es 1, pero se suele usar el coeficiente de 0,25 si se estima que los aparatos funcionan de forma racionada.

Por ejemplo, vamos a suponer que en casa tienes los siguientes electrodomésticos y aparatos: un televisor, un frigorífico, un horno, una vitrocerámica, un lavavajillas, una lavadora y un microondas. Además, cuentas con aire acondicionado. Los kW más habituales que necesitan estos electrodomésticos son los siguientes:

La suma de los kW máximos que vas a necesitar es de 10,85, cantidad que hay que multiplicar por el factor de simultaneidad (0,25). Además, a la cifra resultante se le sumará 1 kW más, para así tener una potencia mínima aproximada. En este supuesto, la potencia contratada sería de, al menos 3,71 kW.

Esta fórmula debe tomarse como algo orientativo, ya que lo ideal es usar alguna calculadora de potencia eléctrica online o el estudio de un electricista profesional para tener la certeza de que no te quedarás ni muy corto ni muy largo.

¿Cómo saber si tienes más de la potencia que necesitas?

Un indicador de que tienes más potencia de luz de la que realmente necesitas es que nunca tendrás cortes de luz. Ojo: esto no quiere decir que tener cortes en el suministro es un buen indicativo, sino que, si al conectar todos tus aparatos eléctricos nunca tienes problemas, es recomendable  revisar qué potencia tienes contratada para comprobar que no estés pagando de más sin necesidad.

Los métodos más recomendables para hacer esta revisión son contar con un estudio de potencia realizado por un electricista profesional o usar una calculadora de potencia eléctrica online, pero es posible que no quieras realizar el desembolso que supone dicho estudio o que no dispongas de la segunda herramienta.

¿Cuál es el precio de la potencia de luz?

El precio de la potencia de luz está regulado por el Gobierno y suele ser el mismo tanto en el mercado libre como en el mercado regulado. A partir de enero de 2022, el precio de la potencia para la tarifa 2.0TD es de 22,988256 euros al año para el periodo 1 (horas punta y horas llanas) y 0,938890 euros al año para el periodo 2 (horas valle). A este precio hay que añadir luego los gravámenes aplicados a la electricidad, como, entre otros, el IVA (del 10% hasta abril de 2022) y el impuesto a la electricidad (del 0,5% hasta abril de 2022).

Por lo tanto, si el consumidor tiene una potencia contratada de 3,71 en ambos periodos, lo que pagará por su peaje de acceso al año serán unos 85,28 euros.

¿Cuáles son los tramos de potencia eléctrica que puedes contratar?

La potencia se contrata por tramos, que están normalizados por el Gobierno desde el año 2006. Por lo tanto, lo más habitual es que un consumidor doméstico contrate alguna de estas potencias, si tiene una instalación monofásica (toda la energía pasa por la misma corriente eléctrica):

Sin embargo, en octubre de 2018 el Gobierno decidió permitir a los usuarios contratar su potencia por tramos que fueran múltiplos de 0,1 kW para que, de esta forma, pudieran ajustar más su potencia.

Antes de esa fecha, si un consumidor tenía contratada la potencia de 4,6 kW y quería bajarla, tenía que acogerse a la otra potencia normalizada más baja: 3.45 kW. Esto podía suponer el riesgo de que el usuario se quedara demasiado corto en cuanto a la potencia que necesita. Con la fórmula actual, el consumidor puede bajar su potencia de luz contratada a 4,4 kW, por lo que el salto es mucho menos brusco. De esta manera, no corre el peligro de acabar contratando una potencia que sea menor a la que realmente necesita.

¿Cuánto cuesta cambiar la potencia de la luz?

Con la entrada en vigor de la nueva tarifa, el usuario doméstico puede hacer dos cambios de potencia de luz gratuitos, siempre que se realicen antes del 31 de mayo de 2022. Además, el cambio solo será gratuito si es para bajar la potencia, pero si es para subirla y la nueva potencia supera a la mayor contratada antes del 1 de junio, el consumidor tendrá que hacerse cargo de los derechos de acometida. Estos derechos son los siguientes:

• Derechos de actuación o de enganche: los gastos que conlleva la actuación en el contador para la modificación de la potencia. Son un total de 9,04 euros.
• Derechos de acceso: la gestión administrativa que realiza el distribuidor. Ascienden a 19,07 euros por kW.
• Derechos de extensión: el uso de las instalaciones para atender el suministro. Son un total de 17,37 euros por kW.

Ejemplo práctico: ¿cuánto cuesta subir la potencia de la luz?

Si un usuario tiene una potencia contratada de 3,7 kW y quiere aumentarla a 4,4 kW, estará dando un salto de 0,7 kW. Por lo tanto, esto sería lo que tendría que pagar para el cambio de potencia de luz:

Gastos de enganche (9,04 euros) + derechos de extensión (15,63 euros) + derechos de acceso (17,16) + IVA (10%) = 46,40 euros.

Ejemplo práctico: ¿cuánto cuesta bajar la potencia de la luz?

Hasta el 31 de mayo de 2022 el usuario puede realizar dos bajadas de la potencia contratada sin ningún coste. A partir de ese momento (o si ya has agotado los dos cambios gratuitos), el cambio de la potencia a la baja puede ser de alrededor de unos 10 euros (los gastos de enganche más el IVA).

¿Qué es el boletín eléctrico y cómo puede afectar en tu cambio de potencia?

Un gasto extra que debes tener en cuenta es el de la actualización del boletín eléctrico o CIE (Certificado de Instalación Eléctrica). Se trata del documento que acredita que tu instalación está en buen estado. Si al cambiar tu potencia también cambia tu boletín (en caso de que la nueva potencia sea superior al máximo que este recoge), ten en cuenta que, en este caso, el gasto puede subir entre 50 y 200 euros, según Endesa.

También tendrás que asumir este gasto si han pasado más de 20 años desde la actualización del boletín, si vives en Canarias y quieres cambiar la potencia de la luz o vas a contratar la instalación eléctrica de una nueva vivienda.

¿Cuánto tarda en realizarse en cambio?

El cambio de potencia tarda, aproximadamente, unos 15 o 20 días hábiles en hacerse efectivo. Para ello, un técnico se personará en tu domicilio para bajar o subir la potencia, según lo que hayas solicitado.

Mientras esto sucede es posible que recibas tu próxima factura con la anterior potencia, aunque ya hayas solicitado el cambio, debido a que el periodo de facturación todavía estaba abierto para ese recibo.

¿Qué requisitos hacen falta para cambiar de potencia de la luz?

Si has decidido cambiar la potencia de luz contratada, entonces tendrás que ponerte en contacto con tu comercializadora para proceder a la modificación. Esto puedes hacerlo por teléfono, vía email o acudiendo a alguna de las oficinas de tu compañía. Entre los documentos que te requerirán se encuentran:

• Nombre y apellidos
• Indicar el DNI del titular del contrato
• Indicar la potencia actual y la nueva potencia a la que quieres pasar
• El código CUPS que podrás encontrar en tu factura

El cambio de potencia tarda, aproximadamente, unos 15 o 20 días hábiles en hacerse efectivo. Para ello, un técnico se personará en tu domicilio para bajar o subir la potencia, según lo que hayas solicitado (con los gastos de actuación pertinentes).

Mientras esto sucede, es posible que recibas tu próxima factura con la anterior potencia, aunque ya hayas solicitado el cambio, debido a que el periodo de facturación todavía estaba abierto para ese recibo.

Cambiar de potencia con Endesa

Para que sepas qué pasos seguir para modificar la potencia, te mostramos el ejemplo de cómo cambiar tu potencia con Endesa, la comercializadora pone a tu disposición una calculadora de potencia eléctrica online con la que podrás calcular qué potencia es la que te conviene contratar para tu hogar. Una vez que tengas claro el cambio que quieres hacer, para cambiar la potencia de luz con Endesa puedes seguir estos pasos:

• Entrar en tu Área de Cliente, en la página web de la empresa.
• Ir a la sección de “Gestiones” y ahí, a la sección de “Tarifas y consumo”.
• Clicar en “Modificar potencia contratada”.
• Elegir la nueva potencia y clicar en “Guardar cambios”.

Otros consejos para ahorrar en tu factura de la luz

Con el cambio de potencia puedes ahorrar unos 5 euros al mes por cada tramo. Sin embargo, este no es el único truco con el que puedes ahorrar en tu factura. Si sigues estos otros consejos, puedes conseguir un ahorro de más de 190 euros anuales:

• Ajusta tu consumo. Otra manera de conseguir un ahorro importante en la factura es ajustar tu consumo a los tramos horarios más baratos. Ten en cuenta que, tanto en el mercado regulado como en las tarifas de luz a precio de coste en el mercado libre, el coste del kWh dependerá de la hora del día. Por ello, ten en cuenta las horas de luz de las que disfrutarás ese día (algo importante cuando se produce el cambio de hora de verano a invierno) e intenta ajustar tu consumo al horario más barato.
• Compara las distintas tarifas del mercado. Además de revisar el tipo de tarifa que tienes, no está de más que compruebes que no hay una oferta mejor en otra compañía. Con un comparador de tarifas de electricidad como el de Kelisto, este proceso es muy sencillo, ya que tendrás toda la información de manera clara y concisa. Con un comparador puedes ahorrar en tu factura hasta 163 euros anuales. Eso sí, si estás planeando cambiar de compañía, ten en cuenta el periodo de permanencia que puedas tener con tu actual comercializadora.

• No dejes los aparatos en stand by. Dejar la televisión con el piloto rojo encendido o no apagar por completo el ordenador consume un 10% extra del consumo eléctrico anual. Apagar los electrodomésticos que dejemos en stand by puede suponer un ahorro anual de 52 euros.
• Usa bombillas LED. Tras la prohibición de las halógenas a partir del pasado mes de septiembre, las bombillas LED son la alternativa más eficiente. Estas lámparas suelen tener un precio más caro en el mercado, pero su vida útil es muy superior a la de las bombillas halógenas, por lo que la inversión inicial se verá totalmente amortizada. Además, transforman el 90% de la energía en luz y no contienen mercurio, por lo que son menos contaminantes.
• Utiliza electrodomésticos eficientes. Presta atención a la etiqueta energética de tus electrodomésticos para hacerte con unos que sean más eficientes. Esto te ayudará a ahorrar en tu factura, ya que, a pesar de que son más caros, consumirán menos electricidad.