Con varias opciones de plazo y rentabilidad, el conjunto de depósitos de CKV es una opción para invertir tus ahorros sin ningún riesgo. De hecho, incluso si el banco quebrara mientras tienes tu dinero en el banco, podrás recurrir al Fondo de Garantía de Depósitos Bélgica, país en el que tiene su sede la entidad. Este se asegurará de devolverte tu dinero –con un máximo de 100.000 euros de compensación-.
Para poder adquirir el depósito de CKV solo tendrás que cumplir con la cantidad mínima –y máxima- establecida por la entidad. Además, te tocará mantener tu dinero en el banco durante el período que pactes. Los beneficios que consigas vendrán expresados con un TIN (Tipo de Interés Nominal) y una TAE (Tasa Anual Equivalente).
Todas las gestiones de contratación se hacen a través de la web de Raisin, que comercializa los depósitos a plazo fijo de CKV. El portal solo te pedirá que antes abras una de sus cuentas bancarias, un producto libre de comisiones.
En lo que sí podrías encontrar algún cargo extra es en el propio depósito a plazo fijo de CKV. Los más habituales tienen que ver con los costes de apertura. Por último, también es posible que en la letra pequeña te encuentres con una "penalización por la cancelación anticipada" de la oferta. Con esto se refieren a que los titulares siempre podrán acceder a los depósitos a plazo fijo de CKV. Para ello tendrás, efectivamente, que anular tu contrato. Esto puede costarte alguna penalización, pero no te preocupes. Siempre recuperarás lo que hubieras invertido y, de comisión máxima, solo podrán cobrarte los intereses que hubieras acumulado.